Desde el principio de los tiempos la humanidad ha tenido dependencias con algún tipo de intoxicación.
Desde la adrenalina y las endorfinas de la guerra, pasando por el alcohol, las plantas psicotrópicas o el estímulo del poder o las riquezas.
Las antiguas culturas del territorio Sudamericano -tenidas hoy día como motivo de babeo por tantos amantes de las etnias nativas- vivían en constante contacto con cuanta planta o sustancia psicotrópica les cayera en mano (and just for the record: en su mayoría los varones eran supermachistas que vivían intoxicados o drogados, explotaban a sus mujeres y las golpeaban cada vez que podían-lamento estropearles el bucólico escenario de las sociedades primitivas maravillosas...En una palabra, que civilizado o salvaje el ser humano ha sido siempre más o menos the same shit..las excepciones, como siempre, confirman la regla general)
En India, país de sabiduría por antonomasia, los Shivaitas fuman Ganja todo el día, y en toda fiesta india nunca faltan las tortitas y dulces con Ganja- es decir, con cannabis, de la más fuerte, la Indica-.
Se especula incluso con que el Soma fue una suerte de hongo, quizás, que les permitió a los antiguos Rishis traspasar por primera las fronteras de la mente.
Hay por lo menos un erudito (John Allegro, aunque cada día aparecen seguidores) que asegura que el culto de Jesús surgió a partir de un hongo psicodélico y que todo gira en realidad alrededor de ese hongo.
Ni que hablar de los artistas de todas las épocas, el alcohol y el opio, y más modernamente la heroina y las drogas de síntesis, han estado entre ellos a la orden del día.
Desde el Johnny Walker de las clases altas hasta el vino en caja de los suburbios, todos se intoxican a troche y moche.
El gran Aldous Huxley, le pidió en su lecho de muerte a Laura, su mujer-una dosis de LSD, al que lo introdujo,junto con la mescalina-su gran amigo el psiquiatra Humphry Osmond.
El maravilloso Alan Watts vivia a base de una combinación de alcohol y distintos psicodélicos-Mescalina, LSD, Cannabis y lo que viniera-.
Los grandes maestros de la India, sea a traves de una auto-inducida ataraxia -que termina anulando la respuesta normal del sistema nervioso autónomo-o de prácticas de indagación y contemplación de diverso tipo, niegan y/o modifican la realidad, de una u otra forma, y no aceptan como válidos los antecedentes de lo sentidos. A través de sus prácticas modifican el sistema nervioso para percibir otra realidad, ya que esta o es falsa, o desechable, o una porquería, según se quiera ver.
Sea por medio de la intoxicación religiosa o la infatuación científica, el hombre remodela la realidad a la medida de sus sueños, necesidades o expectativas.
La epistemología puede ser una droga tan poderosa como el fanatismo religioso o la psilocibina. Aunque sus adalides no sospechen el tipo de manipulación artificial que están ejerciendo sobre su estructura natural dada.
De una u otra manera, toda la humanidad necesita para vivir de alguna suerte de manipulación neuroquímica, que va desde el vino u otros múltiples fermentos pasando por el paco o el éxtasis a la mera interpretación científica del universo o a las descargas catárticas de los evangelistas pentescostales.
Quizás haya que aceptar, finalmente, que esta existencia resulta insoportable para los humanos, sin los barbitúricos, las benzodiazepinas, el alcohol o la cannabis, o cualquier actividad o frenesí que lo ayude a salir de la aparentemente insoportable pesadez del ser.
Como alguna vez descubrió el gran-y vilipendiado-Alexis Carrel, bajo determinadas circunstancias ideales la célula puede vivir indefinidamente. Nosotros-aún conociendo la aplicación de esas "circunstancias ideales", igualmente terminamos rechazándolas, por lo que muy pocos -si acaso alguno- sabe lo que yo ya sé, a saber:
Que de alguna u otra manera todos -o al menos la gran mayoría- terminamos siendo suicidas, aunque las partidas de defunción declaren causas que conforman a los médicos y al resto de los imbéciles -entre los que la mayoria de los médicos van a la vanguardia, por ser de los imbéciles más estólidos que conforman a esta estólida humanidad- pero que no logran engañar a idiotas sólo un poquito más lúcidos como el que esto escribe.
PD: No hace falta agregar que este autor está, desde siempre, a favor de la LIBERTAD COGNITIVA que significa acceso libre y no penalizado a todo tipo de experimentación co cualquier tipo de sustancia.Lo contrario, que es lo que tenemos, lo único que cambia...es la cuenta bancaria de los jueces,banqueros (lava-dineros y demás alimañas) policías, legisladores, gorbernadores y presidentes, más narcotraficantes (quizá los menos culpables, ya que por lo menos ellos no se disfrazan de gente "decente y honorable". Mientras tanto, las que ganan aún más dinero, son las multinacionales farmacéuticas que fabrican drogas mucho más tóxicas que las naturales, que muchos de los psicodélicos sínteticos, y de paso sintetizan los 50 alcaloides de la maravillosa Papaver Somniferum (de la que se extraen los opioides). Ellos sí tienen derecho -el que les da el poder del dinero pero más que nada la IGNORANCIA,LA INDIFERENCIA y la ESTUPIDEZ irreversible de los ciudadanos/as de a pie- de hacer y ganar lo que les dé la gana, si te te pillan a ti con algún derivado de la amapola te dan 25 años si te salvas de la pena de muerte de muchos de los países -que oh casualidad! muchas veces son los mayores cultivadores de amapola-
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comments:
Publicar un comentario