La pobreza argentina es una pobreza pobre. Sin colores,monocorde, sin matices, gris, de casas bajas,sin personalidad.
Si uno compara esa pobreza con la pobreza brasileña, o la pobreza guatelmateca -por citar sólo dos de una pléyade posible- el contraste es brutal.
Si comparamos la pobreza argentina con el cine, podríamos decir que es una pobreza en blanco y negro...y muda, mientras que muchas de las otras pobrezas latinoamericanas son pobrezas en technicolor y con banda de sonido en super-estereo.
Los argentinos vivimos nuestro sudamericanismo como con un toque de verguenza, de bochorno, de no terminar nunca de aceptarlo plenamente, porque nos consideramos algo especial y diferente. Mientras que los Ecuatorianos, por poner sólo un ejemplo más, son sudamericanos plenos, no avergonzados de su condición.
En Ecuador me siento como en casa, porque la gente es simple sin grupo, sin ambages . Son sudamericanos sin sentimientos de culpa.
Nosotros somos demasiado psicoanalíticos.
Qué bien nos vendría un bello baño de simplicidad!
30.4.13
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2 comments:
Los argentinos somos uns "especie exótica", sin identidad ni arraigo, por eso quejosa y pretensiosa, surgida de un "caldo de cultivo cosmopolita", con una combinación, evidentemente, poco feliz.
MC
Amén!
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