21.4.13

Los amantes se acarician regocijados...
Ellos sólo ven el capullo en flor!

De mi libro "La Otra Orilla"

1 comments:

Anónimo dijo...

Un verdadero amante es probado como tal por la pena de su corazón;
no existe ninguna enfermedad como la enfermedad del corazón.
La enfermedad del amante es diferente a todas las otras enfermedades;
el amor es el astrolabio de los Misterios de Dios.
Un amante puede suspirar por éste o aquel amor,
pero al final es arrastrado hasta el Rey del amor.
Por mucho que describamos y expliquemos el amor,
cuando nos enamoramos nos avergonzamos de nuestras palabras.
La explicación por la lengua aclara la mayoría de las cosas,
pero el amor inexplicado es más claro.

Cuando la pluma se apuró a escribir,
al llegar al tema del amor se quebró en dos.
Cuando el discurso tocó el tema del amor,
la pluma se rompió y el papel se rasgó.
Al explicarlo, la razón se atasca, como un asno en el fango;
nada salvo el Amor mismo puede explicar el amor y los amantes;
nadie más que el sol puede exhibir al sol,
si lo vieras exhibido, no te alejes de él.
Las sombras, por cierto, pueden indicar la presencia del sol,
pero solamente el sol exhibe la luz de la vida.

Rumi

 

Copyright 2010 Tristario.

Theme by WordpressCenter.com.
Blogger Template by Beta Templates.