No quiero hacer muy largo este artículo, porque, honestamente, tengo mejores cosas que hacer que intentar esclarecer la mente de aquellos que no desean esclarecerse en absoluto.
Hay una cantidad de palurdos que, armados con el arsenal de la pseudociencia que han logrado captar, quizás, en sus cursos del secundario y en algunas lecturas desordenadas, pretenden convertirse en “caballeros armados” de la Epistemología para opinar en contra de lo que no conocen.
En principio, aviso de antemano que no estoy abierto a ninguna discusión al respecto, salvo con individuos que tengan formación médica y suficientes años de práctica profesional, y que además se haya tomado el trabajo de leer, como mínimo, el Organon de Samuel Hahnemann.
Es difícil, y creo que todos los homeópatas con experiencia se encuentran en situación similar, para alguien que tiene más de treinta años de práctica profesional homeopática, que vengan unos cretinos (porque deben tener algún desorden hormonal) a contarnos cómo es que en realidad no puede volar el abejorro que nosotros vemos volar todos los días.
No se dan cuenta –porque es evidente que no se dan cuenta- que la homeopatía como otras medicinas vitalistas (la Medicina China, por citar sólo una, de cuyos resultados sólo puede dudar hoy en día sólo un Unidimensional como Mario Bunge, epistemólogo brillante pero también energúmeno fenomenal) es una medicina experimental y concreta, que trata con sujetos concretos y en términos concretos de tiempo y espacio. No todas las medicinas que curan lo hacen satisfaciendo todas las expectativas epistemológicas de la ciencia oficial. Y téngase en cuenta que soy pro-ciencia ciento por ciento, pero tengo claro que la ciencia para ser ciencia, no puede caer en las aberraciones de la religión y pretender tener la respuesta para todo y negar todo lo que no está contemplado por el dogma.
Ahora bien, vayamos al núcleo de la cuestión. ¿Es la homeopatía un mero placebo?
Si así fuere, nos encontramos con dos grandes problemas:
1) ¿Cómo se explica el efecto placebo en miles de animales atendidos eficazmente todos los días y todos los años con homeopatía? No me vendrán con el tema cuántico de depende de quien esté mirando los resultados, por favor. Hay miles de veterinarios en el mundo que han visto resultados sorprendentes en áreas de la patología en que la farmacología convencional no obtiene resultados.
2) Si aceptáramos que los resultados que hemos visto durante años en miles de pacientes son resultado del efecto placebo, entonces es menester que se vuelva a remodelar el concepto de placebo y se le de todo el crédito terapéutico que se merece. Porque, si podemos –como que podemos y lo hemos hecho en cientos de ocasiones-quitarle a una criatura que padece Asma la teofilina ,el salbutamol o los corticoesteroides y darle tratamiento homeopático con efectos FEHACIENTEMENTE curativos, entonces, como mínimo, hay que tratar de asesinos a los médicos que han estado privando a estos niños de un remedio fantástico y sin efectos colaterales (el supuesto "placebo") dándole en cambio medicación que a largo plazo, les producirá la incapacidad creciente y una muerte prematura.
Hay muchas áreas que responden a esos aspectos del hombre que aún no pueden ser estudiados bajo los criterios de los estudios cuantificativos y cualificativos a doble le ciego según las exigencias particulares del método científico, por el que tengo sumo respeto, como he dicho. Hay que aceptar eso, o de lo contrario, habría que enseñarle mejor a los médicos de la escuela oficial, para que conozcan todos los beneficios de los maravillosos "placebos" que pueden otorgar bienestar sin efectos colaterales…
No quiero terminar sin agregar –por las dudas- que ni remotamente considero que la homeopatía –ni ninguna otra medicina por sí sola- represente la cura para todas las patologías. A diferencia de muchos de los palurdos ilustrados de la medicina oficial (muchos, NO todos) tenemos Criterio para saber qué puede ser tratado por la Homeopatía y qué no puede ser tratado. Ningún homeópata con la más mínima experiencia clínica pretenderá privar a un paciente de un recurso quirúrgico realmente necesario o de un tratamiento antibioticoterápico urgente. Aunque, para hablar con la única honestidad que conozco, también he visto homeópatas fanáticos que han derrumbado a sus pacientes por no saber evaluar con criterio lo que todo médico debe saber aplicar: la relación riesgo/beneficio, y han continuado medicando homeopáticamente lo que debía ser tratado con rifampicina e isoniazida. En esos casos se debe tratar como lo exige la realidad del paciente (no nuestra filosofía) y luego volveremos a tratar según nuestro criterio de los Miasmas.
Y ya para terminar, citaré a un gran maestro de la clínica oficial, como lo fue el profesor español Dr. López Ibor, cuando con la más absoluta franqueza –propia de los grandes maestros- escribió:
“Toda prescripción médica es un acto experimental”
Así que, por favor, terminémosla de una vez con pretender que no se mueve lo que se está moviendo, porque, “e pur si muove” y seguirá moviéndose aunque no responda a los conceptos establecidos.
Sugerencia: mientras los homeópatas verdaderamente capacitados siguen dando alivio a sus pacientes, los que no estén de acuerdo, continúen estudiando en lugar de opinar sandeces. Y aquellos que no tienen formación médica –como es el caso de ese palurdo maravilloso que es Richard Dawkins- sería mejor que se ocupen de opinar dentro del área de su especialidad.
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3 comments:
Sencillamente...totalmente de acuerdo por ecperiancia personal.
Totalmente de acuerdo. Por experiencia personal y de terceros..entre ellos niños...
Totalmente de acuerdo. Por ecperiencia personal y de terceros...entre ellos niños...
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