30.9.14

En mi ùltimo viaje a Giardino,caminando en el atardecer lucecitas movedizas me acompañaron .
Siempre la llevarè en mi corazòn!!
Querido Manu te mando un fuerte abrazo
29 de septiembre :Un alma entre muchas en los cielos de Giardino
Patry (Tomasella)

                                                   Foto original de Patricia Tomasella

29.9.14

Sylvia!
En tu día, que es además el día de los tres grandes arcángeles, recuerdo contigo esta frase de tu amado Vivekananda que siempre tenías a tu lado:
"Yo Soy el Alma Inmortal! Sin nacimiento ni muerte.
Eternamente dichosa,omnisciente,omnipresente!"

Sólo Tú sabes cuán Presente estás siempre!


4.9.14

Mis últimos tres artículos están vinculados con la catástrofe musulmana.

Y ya he escrito, más de una vez, que el monoteísmo fue, según mi perspectiva, una calamidad catastrófica que cayo sobre el mundo antiguo. Por lo que, siendo esencialmente de formación y vocación Griega, y por tanto "pagano", no me resultan simpáticos los desmanes de la triple catástrofe monoteísta representada por el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam.

Hay hombres maravillosos nacidos dentro del Islam, me crié estudiando a Rumi, a quien llamo Mevlana (literalmente "nuestro Maestro"). Pero Rumi antes que musulmán era un gran místico y un genuino sabio. Y ha habido maravilloso maestros Sufíes a quienes amo, y está al costado de mis notas, como veréis, la imagen de otro maravilloso musulmán como lo fue Bawa Muhaiyaddeen.

Primera aclaración.

Segunda aclaración, así como me resulta repulsivo el estilo de vida del fundamentalismo musulmán, repruebo enfáticamente las atrocidades que el Estado de Israel comete contra el pueblo Palestino, así como las atrocidades que el pueblo palestino cometa contra la gente de Israel. 

Seguramente, a muchos ya no les resultaré tan simpático, porque sólo estoy a favor de la Inteligencia, de la verdadera Inteligencia, que cuando es verdadera, es sinónimo de Amor.

Para el que leyendo hasta aquí,  piense que soy una especie de "flower child" del "peace and love" al estilo sesentista, pues no, tampoco, en absoluto. Porque así como digo esto, también considero que debe haber pena de muerte para la violación seguida de muerte, así como para las madamas, proxenetas y cómplices (jueces,diputados, policías, etc.) que participan en el secuestro de personas para su explotación sexual o de cualquier otro tipo. Cuando escribí esto por primera vez, una querida colega psicóloga me pidió que recapacitara, que "alguien como yo no podía hablar así". Lo lamento, querida amiga,  pero para mí se trata simplemente de un tema de economía social. No hablo de torturarlos -como mucha gente desaforada pretende- para mí no se trata de venganza ni de bronca. No me mueve el odio hacia esos criminales. No me interesa ver sufrir a la gente que comete semejantes crímenes, pero considero que representa un despropósito mayúsculo  que la sociedad los mantenga a costa del erario público, que es el dinero y el esfuerzo de todos. Con el peligro, además, de que alguna vez vuelvan a salir libres para seguir cometiendo tropelías bajo el amparo de un sistema judicial que hacer largo, largo tiempo ya, ha perdido completamente el rumbo, y otorga "derechos humanos" a aquellos que -dada la naturaleza de sus crímenes-han dejado de pertenecer a nuestra especie, por lo menos a la parte de nuestra especie que merece ser conservada.

Para pasar sin más preámbulo a la nota de Pérez Reverte, concluyo: estoy en contra de cualquier sistema religioso que en nombre de cualquier "dios abstracto" sea capaz de torturar y/o matar al Dios Viviente y Visible, que es el prójimo, vivito, palpable y coleando. Estoy en contra de cualquier sistema religioso o social que ponga a la mujer en condición de ciudadana de segunda, para someterla a los caprichos y las veleidades de los machos salvajes que han pretendido usarla y explotarla durante siglos. Y finalmente estoy en contra de la invasión musulmana de Europa y a favor de que los musulmanes fanáticos vuelvan a sus países, y siempre que su intención sea exportar su ignorancia y convertirla en universal, se queden en sus países y no salgan más de ellos.

Dr. Manuel Gerardo Monasterio

“Es la guerra santa, idiotas”

por Arturo Pérez Reverte



Pinchos morunos y cerveza. A la sombra de la antigua muralla de Melilla, mi interlocutor -treinta años de cómplice amistad- se recuesta en la silla y sonríe, amargo. «No se dan cuenta, esos idiotas -dice-. Es una guerra, y estamos metidos en ella. Es la tercera guerra mundial, y no se dan cuenta». Mi amigo sabe de qué habla, pues desde hace mucho es soldado en esa guerra. Soldado anónimo, sin uniforme. De los que a menudo tuvieron que dormir con una pistola debajo de la almohada. «Es una guerra -insiste metiendo el bigote en la espuma de la cerveza-. Y la estamos perdiendo por nuestra estupidez. Sonriendo al enemigo».
Mientras escucho, pienso en el enemigo. Y no necesito forzar la imaginación, pues durante parte de mi vida habité ese territorio. Costumbres, métodos, manera de ejercer la violencia. Todo me es familiar. Todo se repite, como se repite la Historia desde los tiempos de los turcos, Constantinopla y las Cruzadas. Incluso desde las Termópilas. Como se repitió en aquel Irán, donde los incautos de allí y los imbéciles de aquí aplaudían la caída del Sha y la llegada del libertador Jomeini y sus ayatollás. Como se repitió en el babeo indiscriminado ante las diversas primaveras árabes, que al final -sorpresa para los idiotas profesionales- resultaron ser preludios de muy negros inviernos. Inviernos que son de esperar, por otra parte, cuando las palabras libertad y democracia, conceptos occidentales que nuestra ignorancia nos hace creer exportables en frío, por las buenas, fiadas a la bondad del corazón humano, acaban siendo administradas por curas, imanes, sacerdotes o como queramos llamarlos, fanáticos con turbante o sin él, que tarde o temprano hacen verdad de nuevo, entre sus también fanáticos feligreses, lo que escribió el barón Holbach en el siglo XVIII: «Cuando los hombres creen no temer más que a su dios, no se detienen en general ante nada».
Porque es la Yihad, idiotas. Es la guerra santa. Lo sabe mi amigo en Melilla, lo sé yo en mi pequeña parcela de experiencia personal, lo sabe el que haya estado allí. Lo sabe quien haya leído Historia, o sea capaz de encarar los periódicos y la tele con lucidez. Lo sabe quien busque en Internet los miles de vídeos y fotografías de ejecuciones, de cabezas cortadas, de críos mostrando sonrientes a los degollados por sus padres, de mujeres y niños violados por infieles al Islam, de adúlteras lapidadas -cómo callan en eso las ultrafeministas, tan sensibles para otras chorradas-, de criminales cortando cuellos en vivo mientras gritan «Alá Ajbar» y docenas de espectadores lo graban con sus putos teléfonos móviles. Lo sabe quien lea las pancartas que un niño musulmán -no en Iraq, sino en Australia- exhibe con el texto: «Degollad a quien insulte al Profeta». Lo sabe quien vea la pancarta exhibida por un joven estudiante musulmán -no en Damasco, sino en Londres- donde advierte: «Usaremos vuestra democracia para destruir vuestra democracia».
A Occidente, a Europa, le costó siglos de sufrimiento alcanzar la libertad de la que hoy goza. Poder ser adúltera sin que te lapiden, o blasfemar sin que te quemen o que te cuelguen de una grúa. Ponerte falda corta sin que te llamen puta. Gozamos las ventajas de esa lucha, ganada tras muchos combates contra nuestros propios fanatismos, en la que demasiada gente buena perdió la vida: combates que Occidente libró cuando era joven y aún tenía fe. Pero ahora los jóvenes son otros: el niño de la pancarta, el cortador de cabezas, el fanático dispuesto a llevarse por delante a treinta infieles e ir al Paraíso. En términos históricos, ellos son los nuevos bárbaros. Europa, donde nació la libertad, es vieja, demagoga y cobarde; mientras que el Islam radical es joven, valiente, y tiene hambre, desesperación, y los cojones, ellos y ellas, muy puestos en su sitio. Dar mala imagen en Youtube les importa un rábano: al contrario, es otra arma en su guerra. Trabajan con su dios en una mano y el terror en la otra, para su propia clientela. Para un Islam que podría ser pacífico y liberal, que a menudo lo desea, pero que nunca puede lograrlo del todo, atrapado en sus propias contradicciones socioteológicas. Creer que eso se soluciona negociando o mirando a otra parte, es mucho más que una inmensa gilipollez. Es un suicidio. Vean Internet, insisto, y díganme qué diablos vamos a negociar. Y con quién. Es una guerra, y no hay otra que afrontarla. Asumirla sin complejos. Porque el frente de combate no está sólo allí, al otro lado del televisor, sino también aquí. En el corazón mismo de Roma. Porque -creo que lo escribí hace tiempo, aunque igual no fui yo- es contradictorio, peligroso, y hasta imposible, disfrutar de las ventajas de ser romano y al mismo tiempo aplaudir a los bárbaros. (Minuto Digital)

3.9.14

Mientras la mayoría se encuentra jugando con el bombo y la matraca, horrorosas ideologías y cavernarias formas de vida avanzan, sobre Europa y sobre el mundo. Hipnotizados por el consumo y el mediatismo universal, los europeos parecen no ver nada de lo que está ocurriendo.
Hay algunas voces clamantes en el desierto, sin embargo. El parlamentario Holandés GEERT WILDERS es una de ellas.

Personalmente, no estoy en contra del Islam, pero sí me parece repulsivo y merecedor de oposición que pretendan imponer su ideología y su estilo de vida más allá de las fronteras de sus propios países. 

Europa, y muchos otros países del mundo, no están haciendo nada concreto para detener el avance de esta ideología destructiva y retrógrada. Cuando se quieran acordar, va a ser demasiado tarde.

Dr.Manuel Gerardo Monasterio

Dentro de una generación o dos, EEUU se habrá de preguntar: ¿Quien perdió Europa?? He aquí el discurso pronunciado por Geert Wilders, del Partido para la Libertad , Holanda, pronunciado en el Hotel Four Seasons de New York al presentar una Alianza de Patriotas y anunciar la Conferencia para Enfrentar la Jihad en Jerusalén.

Estimados amigos:

 Les agradezco mucho el haberme invitado. He venido a EEUU con una misión. No todo anda bien en el Viejo Mundo. Existe un tremendo peligro acechando. Y es muy difícil ser optimista. Es muy posible que ya estemos transitando las últimas etapas de la Islamización de Europa.
Esto ya no es solamente un peligro claro y actual para el futuro de Europa en sí, sino una amenaza a América y a la mera supervivencia de todo el mundo Occidental. Estados Unidos es el último bastión de la civilización Occidental , enfrentando a una Europa islámica.
En primer lugar les describiré la situación en tierras de Europa misma. Y luego, les diré algunas cosas sobre Islam. Y para cerrar les contaré sobre una reunión realizada en Jerusalén.
La Europa que Uds. conocen está cambiando. Probablemente, Uds. ya hayan visto los hitos. Pero en todas estas ciudades, a veces, a apenas unas pocas cuadras del destino que llevan Uds. como turistas, existe otro mundo. Es el mundo de la sociedad paralela que ha creado la migración masiva Musulmana.
A través de toda Europa está surgiendo una nueva realidad: barrios enteros de Musulmanes donde poquísimos personas nativas residen o si quiera son vistas. Y en el caso de serlo o estarlo, muy posiblemente se arrepientan. Esto se aplica también a la policía.
Es el mundo de las cabezas envueltas en pañuelos, donde las mujeres caminan enfundadas en carpas que deforman sus figuras, empujando cochecitos de bebes y llevando otros niños de la mano. Sus esposos, o si Uds. prefieren "sus amos", caminan por delante a unos tres pasos de distancia. Hay mezquitas en prácticamente cada esquina. Los negocios muestran carteles escritos en letras que NO puedo leer.
Por ningún lado podrán ver que se esté desarrollando alguna actividad económica. Estos son los ghettos Musulmanes controlados por fanáticos religiosos.
Estos son los barrios Musulmanes, y están surgiendo en todas las ciudades de Europa como si fuesen hongos. Estos son los bloques de edificios construidos de tal forma que puedan ser territorialmente controlados en grandes porciones de Europa, calle por calle, barrio por barrio, ciudad por ciudad.
A través de toda Europa hay ahora miles de mezquitas. Cuentan con congregaciones mucho más grandes de las que tiene otras iglesias. Y en cada ciudad Europea ya existen planos para la construcción de "súper-mezquitas" que no harán sino convertir en pigmeos a todas las otras iglesias de la región. No cabe duda, el mensaje es: NOSOTROS REINAMOS.
Muchas ciudades Europeas ya tienen una cuarta parte de su población que es Musulmana; tomen como ejemplo a Ámsterdam, Marsella y Malmo en Suecia. En la muchas ciudades la mayoría de la población menor de 18 años es Musulmana. Paris está ahora rodeada por un anillo de barrios Musulmanes. El nombre más común que se escucha llamar entre los niños en muchas ciudades es: MOHAMMED.
En algunas de las escuelas primarias de Ámsterdam ya ni se mencionan las granjas, porque de así hacerlo significaría mencionar al cerdo, y eso sería un insulto para los Musulmanes. Muchas de las escuelas estatales en Bélgica y Dinamarca sirven solamente alimentos "halal" a sus alumnos.
En la Ámsterdam que alguna vez era tolerante, ahora a los gays se los castiga corporalmente de parte de los Musulmanes exclusivamente. Las mujeres que no son Musulmanas deben escuchar que se las llame "putas, putas". Las antenas satelitales no apuntan hacia las estaciones de TV, sino hacia las estaciones del país de origen.
En Francia las/los maestras(os) de escuela se les recomienda no introducir autores que se puedan considerar ofensivos para los Musulmanes, incluyendo a Voltaire y Diderot; y lo mismo está sucediendo cada vez con más fuerza respecto de Darwin. La historia del holocausto ya no se puede enseñar porque los Musulmanes se ofenden.
En Inglaterra, los tribunales "sharia" han pasado a ser parte oficial del sistema legal Británico. Muchos barrios de Francia son ahora áreas por donde ninguna mujer puede caminar sin cubrirse la cabeza. La semana pasada un hombre casi muere tras haber recibido una feroz golpiza por parte de Musulmanes en Bruselas. Les aseguro que podría seguir relatando historias como estas durante horas y horas. Historias sobre la islamización.
Un total de 54 millones de Musulmanes viven ahora en Europa. La Universidad de San Diego ha calculado recientemente que no menos del 25% de la población Europea será Musulmana en apenas los próximos 12 años a contar de ahora. Y Bernard Lewis pronostica que habrá una mayoría Musulmana para cuando finalice este siglo.
Pero estas son nada más que cifras. Y las cifras no serían una amenaza si los migrantes musulmanes mostrasen que estarían dispuestos a integrarse adecuadamente con la sociedad que los acoge. Pero apenas si dan muestras de desear tal cosa.
El Centro de Investigaciones Religiosas informó que la mitad de los Musulmanes Franceses consideran que su lealtad para con el Islam es mucho más importante que su lealtad para con Francia. Un tercio de los Franceses Musulmanes NO rechazan los ataques suicidas.
El Centro Británico por la Cohesión Social informó que un tercio de los estudiantes Británicos Musulmanes están a favor de la instauración del califato a nivel mundial. Los musulmanes exigen lo que ellos llaman "respeto". Y así es lo que nosotros les damos nuestro respeto: Tenemos feriados nacionales Musulmanes aprobados que ya se vienen observando en nuestro propio país.
El Fiscal General de nuestro país que es una Democracia Cristiana está dispuesto a aceptar la sharia en los Países Bajos si se constata que hay una mayoría Musulmana. Ya tenemos miembros del Gabinete nacional que poseen pasaportes de Marruecos y Turquía.
Las exigencias Musulmanas están siendo apoyadas por comportamientos ilegales, que van desde delitos menores y violencia indiscriminada, como por ejemplo la que se aplica contra los conductores de ambulancias y de ómnibus, hasta huelgas y protestas menores.
En París se han registrados hechos de este tipo en los suburbios de menores ingresos, llamados "banlieus". Personalmente yo me refiero a estos actores, denominándolos "colonizadores", porque eso es lo que son. No vienen para integrarse a nuestra sociedad; vienen para que nuestra sociedad se integre a su Dar-al-Islam. Por lo tanto, solo pueden ser calificados como "colonizadores".
Mucha de esta violencia callejera que les relato, está dirigida casi exclusivamente contra los no-Musulmanes y el objeto es forzar a que mucha gente abandone sus barrios, sus ciudades, sus países. Es más, los Musulmanes están dispuestos a todo como para que nadie los ignore.
Lo segundo que Uds. deben conocer es la importancia que tiene el profeta Mohammed. Su comportamiento es un claro ejemplo para todos los Musulmanes y en modo alguno podrá ser criticado. Ahora bien, si Mohammed (Mahoma) hubiese sido un hombre de paz, digamos como Ghandi y la Madre Teresa -ambos aunados-no existiría ningún problema.
Pero, resulta ser que Mahoma fue un jefe guerrero, asesino de masas, pedófilo, que tuvo muchas esposas, todo al mismo tiempo. La tradición islámica nos relata cómo peleaba en las batallas, de qué manera asesinaba a sus enemigos o ejecutaba a sus prisioneros de guerra.
Fue Mahoma en persona quien ejecutó a la tribu Judía de Banu Qurayza. Su pensamiento es que: si es bueno para el Islam, está todo bien. Y si es malo para el Islam, está todo mal.
No se dejen engañar con eso de que el Islam es una RELIGION. Seguro que tienen un dios y también un después-de, y 72 vírgenes. Pero en su esencia el Islamismo es una ideología política.
Es un sistema que fija reglas detalladas para la sociedad y la vida de cada individuo. El Islamismo pretende dictar leyes que hacen a todos los aspectos de nuestras vidas. Islamismo significa SUMISION TOTAL.
El Islamismo no es compatible con la libertad y la democracia, porque su meta es solamente la "sharia". Si Uds. quieren comparar el islamismo con cualquier cosa, compárenlo con el comunismo o el nacional-socialismo, que son todas ideologías totalitarias.
Ahora ya saben Uds. por qué Winston Churchill cuando hablaba del Islam, se refería a ellos como "la fuerza más retrograda en todo el mundo" y por qué comparaba el famoso libro MEIN KAMPF con el Corán. El público en general ha aceptado de buen grado la narrativa Palestina.
Este pequeño país situado sobre una defectuosa línea divisoria de la jihad, frustra el avance territorial del Islam. Israel está enfrentando las líneas de avance de la jihad, como Kashmir, Kosovo, las Filipinas, el sur de Tailandia, Darfur en Sudan, Líbano y Aceh en Indonesia. Igual que lo que sucedió con Berlín Occidental durante la Guerra Fría.
De no haber existido Israel, el imperialismo Islámico habría encontrado otros a quien inculpar y contra los cuales descargar todas sus energías y deseos de conquista.
Dios no permita, que si Israel cayese, no le traería al mundo Occidental ningún consuelo o paz. Ni tampoco significaría que nuestra minorías Musulmanas modificarían repentinamente su comportamiento o que aceptarían nuestro valores. Muy por el contrario, si Israel dejase de existir haría que las fuerzas del Islam se fortalecerían enormemente.
Y, con toda la razón a su favor, verían que la desaparición de Israel no sería otra cosa que la prueba irrefutable de que el mundo Occidental es débil y está condenado. El fin de Israel no significaría el fin de nuestros problemas con el Islamismo, sino apenas el comienzo. Significaría el comienzo de la batalla final por el dominio del mundo.
Muchos mal-llamados periodistas se animan a calificar cualquier y toda crítica del Islamismo como que proviene de "racistas" o "extremistas de la más rancia derecha".
En mi país, Holanda, el 60 por ciento de la población ahora considera que la inmigración masiva de Musulmanes representa la política más equivocada que se haya instaurado desde la Segunda Guerra Mundial. Y otro 60% de la población, considera que el Islam es la más importante amenaza que enfrentamos.
Pero existe un peligro mucho más grande, aun, que los ataques terroristas, y ello es el escenario de EEUU como el último pueblo en pie. Podría suceder que las luces de Europa se apaguen mucho antes de lo que nos podamos imaginar.
Una Europa Islámica significaría una Europa sin libertad y sin democracia, un territorio desierto económicamente, una pesadilla intelectual, y la pérdida del poder militar para América - por cuanto sus aliados se convertirían en enemigos, enemigos con bombas atómicas. Con una Europa Islámica, solo nos quedaría EEUU para preservar la herencia de Roma, Atenas y Jerusalén.
Estimados amigos, la libertad es el más preciado bien que se nos ha legado. Mi generación nunca tuvo que pelear por su libertad, nos fue ofrecida en bandeja de plata por gente que peleó por ella y ofrendó su vida. En toda Europa, los cementerios Americanos nos recuerdan de los jóvenes soldados que no pudieron volver a sus hogares, y a quienes siempre recordamos agradecidos.
Mi generación no es la dueña de esta libertad, apenas si somos sus custodios. Tan solo podemos traspasarle esta libertad ganada con mucho sacrificio a los niños de Europa de la misma manera que nos fuera entregada a nosotros. No podemos transar con "mullahs" e "imams". Las generaciones futuras jamás nos lo perdonarían. En modo alguno podemos despilfarrar nuestras libertades. Simplemente NO TENEMOS NINGUN DERECHO DE HACERLO.
Debemos tomar ya mismo las decisiones necesarias para frenar esta estupidez Islámica que pretende destruir este mundo libre que tenemos ahora.
Ruego a todos Uds. se tomen unos minutos para leer todo esto que he escrito. Y también les ruego lo hagan llegar a todos sus conocidos, porque es tan, pero tan, importante.
GEERT WILDERS
 

Copyright 2010 Tristario.

Theme by WordpressCenter.com.
Blogger Template by Beta Templates.