Abandona toda esperanza de alcanzar lo que muchos llaman la "iluminación".
No existe tal cosa desde una perspectiva personal.
La Iluminación es el estado natural de todo lo que existe,sin que haya nada que hacer al respecto, más que dejar de ejercer resistencia mediante el análisis, la interpretación o la conceptualización de lo que ocurre.
Muchos piensan que la "iluminación" es el resultado de ingentes esfuerzos y tremendas ascesis continuadas a lo largo de años de arduas labores internas...Y en realidad,cualquier cosa que llamemos "iluminación" no es más que exactamente lo contrario, el descubrimiento y la percepción directa de que todos nuestros esfuerzos son absolutamente inútiles y que no hay nada que podamos hacer para alcanzar Aquello que siempre estuvo allí desde un principio y siempre.
Lo que Es está siempre allí, y cuando el fantasma verbalizado -el constructo psicolinguístico- que llamamos nuestro yo (con toda su historia-historieta) sale de escena y pasa a las bambalinas de donde no debería salir nunca, la Iluminación se manifiesta sin que haya nadie que pueda asumirla como propia, porque es el estado natural de la totalidad que está aconteciendo aqui y ahora y desde siempre y para siempre.
Sin la resistencia del pensamiento y sus interpretaciones, la Vida se manifiesta en toda su plenitud aún allí en medio de lo que un observador incauto podría considerar un infierno.
No hay nada que hacer para lograr que lo que ya Es sea más de lo que Es.
Abandona toda esperanza de intentar con tu volición alcanzar aquello que nada tiene que ver contigo en el sentido personal en que tu -ilusoriamente-te has considerado desde que tus padres te pusieron nombre y te arrojaron encima la mentira en la que ellos y sus antepasados han vivido confundidos desde tiempo inmemorial.
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