25.8.07

Comencé mi vida obsesionado con el tema de Dios e inmerso en la investigación de las religiones. Ha sido largo, larguísimo mi camino a Damasco.Y profunda la Noche del Alma.
Finalmente, la existencia de Dios comenzó a inquietarme mucho más que su ausencia. Porque, ¿Qué clase de Dios puede haber creado algo semejante? y ¿Cuál podría ser la Naturaleza de Algo Semejante?

La presunción de los religiosos que pretenden ser voceros autorizados de la Palabra de Dios, me resulta abominable. Difícilmente exista blasfemia mayor que pretender saber lo que Dios es, lo que Dios "busca" o lo que Dios "quiere".

"El intelecto tiene tanto derecho de conocer la verdad como el hocico de un cerdo" H.G.Wells

"If you think you know what the hell is going on, you're probably full of shit." Robert Anton Wilson

Días pasados un matrimonio cuya pequeña hija se había salvado de una enfermedad generalmente fatal, agradecía a Dios "por haber realizado el milagro" de salvar a la niña. Esta actitud, de lo más natural en la mayoría de la gente, me produjo a mí en cambio una sensación de horror, porque, ¿Y qué ha pasado con los cientos de niños que murieron ese mismo día? ¿Cuál fue en estos casos la voluntad de Dios? ¿Salvó acaso a esta niña y abandonó a todos los demás? En una situación como esta, que de una u otra forma se presenta a diario en miles de formas diferentes -con gente tan fervorosamente "creyente" como aquella-creer que Dios existe de una manera participativa en el destino de los hombres me produce una inquietud inenarrable.

Por eso tengo a Wittgenstein como a uno de los más grandes filósofos religiosos, y he utilizado como título o fronstispicio de este escrito la última frase de su Tractatus:

"Acerca de lo que no se puede hablar, más vale mantener silencio"

Filósofo religioso, he dicho, porque no hay religión más certera y profunda que el Silencio, que es lo único que hace justicia a Aquello acerca de lo que nada podemos pensar y nada podemos decir. El cúmulo de palabras que los hombres han ocupado a lo largo de los siglos acerca de eso sobre lo que nada puede decirse, nos da una idea cabal de la ignorancia tremenda en la que se abisma la humanidad, ahora y siempre.
 

Copyright 2010 Tristario.

Theme by WordpressCenter.com.
Blogger Template by Beta Templates.